Por si, como yo, no conocéis ese pueblo, os diré que es un rinconcito muy tranquilo de la costa brava, con unas calitas con mucho encanto, ideal para bucear y disfrutar de los paisajes.
Como era una barbacoa con niños, llevamos dos tartas, esta y la tarta de frutos del bosque que subiré más tarde.
Esta tarta es fresquita y con un sabor delicado. Se puede comer congelada, como tarta helada, o solo refrigerada.
Ingredientes:
Base de galleta:
200 grs de galletas (tipo digestive)
80 grs de mantequilla
Crema suave de limón:
100 grs de zumo de limón
250 grs de leche entera
1 lata pequeña de leche condensada
1 sobre de gelatina de limón
1 sobre de gelatina neutra
500 grs de nata para montar
Chocolate blanco para decorar
Preparación:
Triturar las galletas con la mantequilla, programando 20 segundos, velocidad progresiva 5-10.
Extender sobre la base del molde desmontable y presionar con un vaso para que quede compacto.
En el vaso, poner la leche y programar 5 minutos, 90 grados, velocidad 2.
Añadir los sobres de gelatina y programar 2 minutos, velocidad 2.
Añadir la leche condensada y el zumo de limón y programar 2 minutos, velocidad 2.
Dejar enfriar un poquito la mezcla y, mientras, montar la nata con una batidora de barillas (la nata tiene que estar muy fria)
Incorporar a la nata la mezcla de gelatina y mezclar con movimientos envolventes.
Poner la mezcla sobre la capa de galletas y dejar cuajar unas 4 horas.
Con el pelapatatas, rascar la tableta de chocolate y colocar sobre la tarta.
Buen verano a tod@s!
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